FRONTONES


En este capitulo de deportes en el barrio no puede dejar de mencionarse el juego de la pelota. Este deporte, que por sobre la destreza requiere vigor y resistencia, se debe a los vascos, que lo introdujeron en Buenos Aires como entretenimiento.
En Almagro, como en muchos barrios de la ciudad y gran cantidad de localidades de la Provincia de Buenos Aires, este juego tuvo gran repercusión popular. Por esto fueron muchos los escenarios donde los grandes pelotaris de la época protagonizaron memorables partidos, que los entusiastas de estas competencias recuerdan con renovado interés.
Para citar solamente algunos de estos escenarios, se puede mencionar la cancha conocida como La Cerrada, de Anchorena y Rivadavia, habilitada por Josemari Peyrelongue; la ubicada en la calle Gascón y el puente del ferrocarril, llamada de Churrita o del ñato Alejandro; la de Simón Soroet o la de Venezuela, que ocupaba el ángulo sudeste de Castro Barros y Venezuela, corriéndose por ésta hasta la calle Pérez, en la que daba la pared del frontón; la de Martín Hoyamburu era la de Castro Barros, ubicada a pocos metros de la Avenida Rivadavia.
De estas canchas famosas, cabe agregar la de Almagro, inaugurada en 1916, y que fue de los hijos del nombrado Josemari Peyrelongue: Graciano y Bachicha, ubicada en Avenida Rivadavia 3777. Este trinquete podría ser el más antiguo existente en la Ciudad. El viejo trinquete Almagro fue cuna de la pelota a paleta, y escenario de los partidos de más alto nivel, no sólo de nuestro país, sino del mundo.
Actualmente este deporte se practica activamente en la sede del Centro Navarro, ubicado en la calle Moreno 3682 (esquina Colombres).

Fuente: Almagro, El Pasado que Perdura - Autor: Carlos Trueba