ESCUELAS RELIGIOSAS

En diciembre de 1877 llegaban a Montevideo las seis primeras Religiosas destinadas a inaugurar en América la misión de las Hijas de María Auxiliadora. Hubo algunas primeras dificultades para su ubicación en Buenos Aires. Primero intentaron hacerlo en la capilla de Nuestra Señora de la Merced de Sión, donde actualmente se encuentra la iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes de Sión en el barrio de Almagro. Luego hubo un proyecto de comprar un lote en la esquina de las actuales calles Treinta y Tres Orientales e Hipólito Yirigoyen. Finalmente se ubicaron en la esquina de esta última calle y Yapeyú, en la misma manzana del Colegio Pío IX, antiguo almacén de los Estebarena. El lugar donde habitaban -modesto, por cierto- lo llamaron cariñosamente el ranchito de Belén.
El Colegio de las Religiosas en Almagro se inauguró el 7 de junio de 1883, en un predio ubicado en la manzana comprendida por las calles Yapeyú, Hipólito Yrigoyen, Castro Barros y Don Bosco. El lugar dejado por las Religiosas fue ocupado para atender a los novicios salesianos.
Las primeras alumnas ingresaron el año escolar 1884. El edificio tenía dos pisos, y la iglesia era de una sola nave. En febrero de ese año ingresaron las primeras pupilas.
El predio original fue ampliado. Así fue que en 1887 se compró un terreno a un señor Garré, en parte sobre la calle Victoria (hoy H. Yirigoyen), y se construyó un brazo del edificio de dos pisos y un corredor. Años más tarde, en 1889, se consiguió otro terreno de un señor Borzone, mediante un generoso mutuo hecho por monseñor Cagliero en el ángulo de las calles Yapeyú y San Carlos (hoy, Dos Bosco).
La compra se formalizó en 1891 en un perímetro de "30 varas de frente por 60 de fondo, a 12 pesos la vara cuadrada", dando el señor Borzone todas las facilidades.
La edificación se concluyó ese mismo año 1891: un brazo de dos pisos, con la planta baja para salón de actos y la superior para dormitorio, sobre la actual calle Don Bosco. La esquina de esta con Yapeyú se comenzó a construir en agosto de 1894, habilitándose al año siguiente, con la bendición del padre Vespignani. El mayor impulso que alcanzó el Colegio fue el año 1900, con la incorporación a la Escuela N° 2 del Profesorado de Lenguas Vivas.

Otra institución religiosa dedicada a la actividad educativa, ubicada en el barrio de Almagro, es el INSTITUTO DEL SAGRADO CORAZÓN. Este establecimiento, ya centenario, se fundó el 25 de mayo de 1884 en una casa ubicada en Riobamba y Tucumán. Al poco tiempo, debido al creciente alumnado que quería concurrir a sus aulas, se trasladó a Almagro, al lugar que actualmente ocupa en la calle Hipólito Yrigoyen, entre Muñiz y Avenida La Plata, en un terreno de casi una manzana de superficie.
Sobre aquella calle se encuentra la fachada principal de su monumental edificación y su hermoso jardín. Desarrolla una trascendente labor educativa, y su conducción se encuentra a cargo de las Religiosas del Sagrado Corazón, consagración que llegó al país el año 1880, para cumplir especialmente con la misión educadora. Su fundadora, santa Magdalena Sofía Barat, transmitió hasta el final de su vida la bondad, la dulzura y la abnegación, cualidades que adornaban su corazón.
La capilla instalada en el edificio del Colegio, de estilo gótico, fue construida en 1896.
En 1937 se incorporó a la enseñanza oficial, con la apertura de los cursos de magisterio y bachillerato, contando en esos tiempos con la abnegada dedicación de la madre Hilaria de la Cuadra, eminente educadora, que dejó una huella profunda en las alumnas que pudieron gozar del enorme privilegio que significó para ellas recibir las enseñanzas de quien merece el máximo reconocimiento por parte del Colegio, por haber sido cabal intérprete de lo que fue su lema inicial: "Amor y Alegría entre educandas y maestras".

Instalado en el barrio funciona el COLEGIO DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN, institución que, como la anterior, también se dedica a la enseñanza. Inició sus actividades en una casa alquilada de Perú 959 el 15 de febrero de 1898. En esa oportunidad fue para la enseñanza de corte, confección y artes manuales, donde también funcionó el primer noviciado de la Congregación de las Hijas de la Inmaculada Concepción. En esa fecha ingresó como novicia, Josefina Tognoni, más tarde la madre Estanislada, quien fundó en 1902 el actual Colegio de la calle Mario Bravo y Humahuaca.
Como aquel local de la calle Perú resultaba insuficiente, el Colegio se trasladó a la calle Independencia, frente a la parroquia de la Inmaculada Concepción.
En marzo de 1902 adquirió, ya en Almagro, un solar de 40 por 50 metros en la calle Lavalle, entre Billinghurst y Sánchez de Bustamante.
Por último, y por donación hecha por Elisa de Ezcurra -hecho que se recuerda con una placa en la fachada del templo de la calle Mario Bravo-, el Colegio quedó definitivamente instalado en Mario Bravo y Humahuaca.
En 1930 se inició la enseñanza secundaria como Liceo Nacional de Señoritas.
Fueron sus directoras, además de la madre Estanislada, las madres Juana Capóani, Luisa Iáconis, Germana Paván e Inmaculada Marchiona, y la hermana Florentina Manzur.

Fuente: Almagro, El pasado que perdura
Autor: Carlos Trueba